martes, 24 de noviembre de 2020

INTEGRIDAD Y HONOR.


Vivimos en un mundo de conflictos, de confrontación, vivimos en un mundo que es a la vez atroz, esplé
ndido, enigmático y no podemos permitirnos caer en comportamientos poco éticos o despreciables. Ser honorables significa actuar con rectitud, mantenernos firmes en el camino del guerrero, si fallamos, ser honorables significa levantarnos otra vez, seguir hacia adelante. 

 

No os hablaré del Tao, ni del Bushi_do, ni si quiera del chamán Don Juan, de Carlos Castaneda, en los que me cobijé bajo sus sombras en tiempos lejanos de mi juventud, cuando aún pensaba que esos caminos me llevarían a las alturas, donde el aire es más liviano y el pensamiento más profundo. No hay atajos en el camino. No hay teoría, no hay discursos, sino reglas de conducta para llevar una vida “fuerte y clara” en medio de una realidad que nos debilita, nos dispersa, nos embota.


No hay que subir a una sagrada montaña, la montaña eres tu. No hay que ponerse debajo de una fría cascada, la cascada eres tu. No hay que retirarse a un templo, el templo eres tu. No hay que buscar una senda, la senda eres tu. Conócete a ti mismo, levántate y anda, ese es el camino del guerrero.


A la gente, le da miedo mirar su interior, ver y analizar su verdadero “Yo”. No son lo que realmente creen ser, han construido una personalidad ficticia que se ajusta a sus necesidades y no a su verdadera naturaleza, una irreal proyección construida, para presentarse ante los demás y lo peor, presentarse ante sí mismos, eso es lo más triste, creen ser lo que ellos piensan que son.

Por ello, la senda que recorremos nace como práctica, no como discurso, especulación o construcción de un sistema teórico, sino como transformación de uno mismo.


Practicamos el arte de la atención, ejercido durante décadas. El aprendizaje de una vida impecable es interminable. La claridad es la fuerza. Vivimos impecablemente cuando estamos presentes en lo que hacemos. Cuando nuestras decisiones son precisas. Cuando nos hacemos cargo de nuestros actos. Son disposiciones éticas que van a contracorriente de las tendencias dominantes de nuestra sociedad. Mantenernos alerta y estar siempre dispuestos a renovar la mirada sobre todas las cosas que nos rodean, sobre los otros y sobre nosotros mismos continuamente.

 

 


No hay comentarios:

Publicar un comentario

  LA SENDA DE LOS CINCO C AMINOS .    Hace tiempo que no escribo nada aquí. Esto se debe a que con lo que ya hay escrito, se me antoja sufi...